Los humanos comemos por muchas razones. Primero y principal, necesitamos el combustible que nos da la energía necesaria para seguir durante todo el día. Muchos de nosotros comemos de una manera particular para beneficiar nuestro corazón, o si se padece de enfermedades como la diabetes, hipertensión, obesidad, etc. Pero no es común que alguien consuma determinados alimentos para el cerebro. 
El cerebro controla el cuerpo y nuestra habilidad para pensar, comunicarnos, movernos y funcionar en general. Por lo tanto, quizás sea importante ayudar a este órgano incluyendo alimentos que podrían beneficiarlo.
Uno de los métodos que se ha aplicado en algunos colegios de Estados Unidos, es proveer a los niños con un buen desayuno. Esto es importante para considerar ya que se han demostrado importantes mejorías en el rendimiento académico. Los niños que no consumían desayuno eran más propensos a cometer errores en su trabajo y tenías más desafíos con la memoria. Además, sus calificaciones en los exámenes cognitivos eran más bajas. Notando el impacto de esta experiencia, se demuestra realmente la importancia que una dieta adecuada tiene para nuestro cerebro.
El cerebro necesita azúcar en forma de glucosa para poder llevar a cabo casi cualquier tarea que necesite hacer. Es, de hecho, el combustible que el cerebro utiliza. Como las neuronas del cerebro no tienen la habilidad de almacenar glucosa como lo hace el resto del cuerpo, dependen por completo del corriente sanguíneo para que les provea este combustible necesario. Los carbohidratos son ideales para el cerebro debido a que proveen rápidamente energía suficiente, pero es importante elegir los carbohidratos complejos en vez de los simples.
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