Un orzuelo es una inflamación de las glándulas sebáceas de Zeiss o Moll en la base de las pestañas.
Si bien no es una afección grave, puede llegar a ser bastante dolorosa. La causa de este trastorno es una infección bacteriana producida comúnmente por la bacteria estafilococo aureus.
Se manifiesta como una inflamación rojiza y tierna al tacto en el borde del párpado que tiende a drenar espontáneamente en poco tiempo, en el lugar de la lesión se palpa un nódulo duro y muy doloroso.
Los orzuelos se deben a una proliferación de gérmenes que forman un pequeño absceso en las glándulas sebáceas antes mencionadas. Otra causa se debe a frotarse los ojos con las manos sucias.
No se debe intentar apretar, frotar ni extirpar los orzuelos o cualquier otro tipo de protuberancia del párpado, sino dejarlos que drenen por sí solos, el mejor tratamiento consiste simplemente en las medidas higiénicas que ayuden al mantenimiento de la limpieza de la zona para prevenir infecciones. También puede ser de ayuda para liberar la obstrucción de la glándula la aplicación de compresas calientes. La administración de gotas con antibióticos puede ser eficaz si se ha producido el caso de conjuntivitis secundaria por contaminación directa en los casos de orzuelos recurrentes o persistentes. Asimismo, un ungüento con dexametasona puede ayudar a reducir la inflamación.
Los orzuelos en algunos casos tienden a dejar como secuela una bolita de grasa dura, que debe ser extirpada quirúrgicamente o bien realizar su drenaje mediante una incisión con bisturí.No deben presionarse para conseguir su vaciamiento, ya que podría diseminarse la infección.
Debido a que el ojo provee un ingreso directo al sistema linfático y sanguíneo es particularmente recomendable consultar un médico antes de aplicar un medicamento.
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