Cuando llega el verano además del calor y la piscina aparecen unos bichitos que nos traen muchos problemas y más aun a nuestros hijos, estos son los famosos piojos.
En primer lugar no te asustes si tu hijo se ha contagiado de piojos ya que es normal y común durante la infancia, los piojos son muy molestos pero no es una enfermedad es por eso que hay que tener en cuenta unos prácticos consejos para prevenir, reconocer y tratar los piojos en las cabecitas de nuestros hijos.
· Para evitar los piojos en primer lugar hay que tener e cuenta que los piojos no pueden sobrevivir mucho tiempo fuera del cuero cabelludo, por esto se debe evitar compartir accesorios para el cabello como sombreros, peines, cepillos, y todo aquello relacionado con los peinados.
· La forma más práctica de saber si tu hijo tiene piojos es si siente picor y por consiguiente se rasca constantemente.
· Los piojos no vuelan ni saltan pero si se mueven rápidamente por esto es muy difícil pero no imposible encontrar un piojo vivo, su apariencia es de color gris o marrón y un piojo adulto puede llegar a medir unas 3 pulgadas. La apariencia de las liendres y huevos es ovalada y de color canela, amarillo o marrón.
· El tratamiento es fácil, económico y sencillo tanto para tratamientos con champús y lociones como un tratamiento casero. En el mercado se ofrecen una gran variedad de productos contra la pediculosis, por lo general son muy efectivos y el tratamiento puede llegar a durar entre siete y diez días.
· También hay algunas recetas de remedios caseros una de ellas es cubrir el cabello con aceite de oliva, mayonesa o vaselina este tratamiento funciona principalmente para sofocar las liendres y piojos además de poder extraerlos más fácilmente.
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