Ataque de hígado, una molestia que nada tiene que ver con el hígado
A pesar de lo que la mayoría puede llegar a pensar, el ataque de hígado, es un problema digestivo que nada tiene que ver con hígado. Aunque esto seguramente resulte difícil de creer vamos a contarte un poco, como se considera esto y por qué estamos equivocados cuando decimos que nos duele el hígado.
Se considera que un ataque de hígado es un trastorno digestivo que provoca dolor, algunas molestias e inflamación en la parte superior derecha del abdomen, dolores de cabeza, sensación de estómago super lleno y algunas nauseas. Estos síntomas en algunas ocasiones están acompañados por otros que incluyen, sabor amargo en la boca, eructos con fuerte olor ahuevo y también se pueden presentar mareos, vómitos y la sensación del decaimiento en general del cuerpo.
El conocido por todos ataque de hígado se provoca horas después de haber ingerido alimentos grasos que pueden estar acompañados de otros que tal vez contengan almidón, por ejemplo las hamburguesas y las papas fritas, los embutidos con pan y otros. En el caso de haber consumido alimentos con estas características vamos a padecer estos síntomas si lo hacemos de manera excesiva.
Pero vamos a lo que dijimos inicialmente en el artículo, por qué se le dice ataque de hígado si en realidad el órgano en cuestión no tiene nada que ver. Los que hemos pasado por uno o más ataques de hígado reconocemos casi inmediatamente los síntomas y no estamos dispuestos a creer que el hígado no está implicado en el problema.
Diremos que el hígado genera bilis y esta se deposita en la vesícula, cuando la digestión se realiza la vesícula comienza a descargar bilis en el intestino con la función de disolver las grasas, esta descarga se realiza en forma de contracciones.
Cuando los alimentos muy grasos son consumidos la vesícula se ve obligada a verter más bilis y esto provoca que trabaje en exceso, por contraerse un mayor número de veces, si además dentro de ella se encuentran cálculos el dolor se hace más pronunciado, por eso decimos que la vesícula es la que provoca el dolor, debería decir, "Ataque de vesícula".
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